TRANSMISIÓN 112
SECTOR_01//TRANSMISIÓN 112 DE 321

Transmisión 112

Transmisión 112

Fecha: 22.04.2189 Hora: 02:15

La escalera de mantenimiento asciende en una espiral monótona y oscura. Subo lo más rápido que mis piernas cansadas y mi cabeza palpitante me permiten, el sonido metálico de mis pasos resonando ruidosamente en el espacio confinado. Cada peldaño es un esfuerzo. Espero a cada instante oír disparos desde abajo, o sentir la presencia helada del Cazador ascendiendo tras de mí como una sombra imparable.

Pero, por el momento, no oigo nada más que mi propia respiración jadeante y el latido de mi corazón en mis oídos. El silencio relativo es casi más inquietante que la persecución abierta. ¿Se han rendido? Improbable. ¿Están buscando otra ruta? Más probable. ¿O simplemente están esperando a que salga a la luz?

El conducto de ventilación vertical por el que escapé de la cámara de mantenimiento anterior era sin duda una ruta más discreta, más olvidada. Esta escalera, aunque oculta tras la puerta reventada, parece más estándar, más conectada a la red de pasillos de servicio de la ciudad. Es probable que sea conocida por las patrullas de Silenciadores o utilizada por las bandas locales que operan en estos niveles. No puedo permitirme quedarme aquí mucho tiempo. Cada segundo que paso en esta escalera aumenta el riesgo de ser interceptado.

Después de subir lo que calculo que podrían ser dos o tres niveles –la arquitectura laberíntica de Oakhaven hace difícil juzgar las distancias verticales–, llego a un pequeño descansillo metálico. La escalera se bifurca aquí. Un tramo continúa hacia arriba, perdiéndose en la oscuridad, presumiblemente hacia niveles aún más altos y, por lo tanto, más vigilados por la autoridad central o las facciones dominantes. El otro tramo termina abruptamente ante una puerta metálica pesada y oxidada.

Me acerco a la puerta. Está marcada con un símbolo descolorido y apenas legible: un número 8 dentro de un triángulo, con las letras "DELTA" debajo. "Acceso - Sector Residencial 8-Delta".

El Nivel 8. Según Gear, todavía se considera parte de los niveles inferiores, pero está más poblado y menos abandonado que el Nivel 9-Alfa de donde vengo. Entrar en una zona residencial activa es un riesgo considerable. Más gente significa más testigos potenciales, más posibles informantes para los Silenciadores, más posibilidades de encuentros no deseados con bandas locales o matones.

Pero también ofrece la posibilidad de hacer lo que más necesito ahora mismo: perderme entre la multitud. Encontrar un lugar donde pasar desapercibido, aunque sea temporalmente. Conseguir suministros. Y quizás, solo quizás, encontrar un rincón tranquilo donde pueda finalmente empezar a estudiar los artefactos que porto, intentar comprender el poder y el peligro que representan. Quedarme en los túneles de servicio y conductos de ventilación solo es una solución a corto plazo; necesito integrarme, aunque sea superficialmente, en el tejido de la ciudad para sobrevivir a largo plazo.

Es una apuesta. Como todo lo demás. Pero seguir subiendo hacia niveles más controlados parece aún más peligroso.

Decido arriesgarme. Agarro la manija oxidada de la puerta y tiro con fuerza. Cede con un chirrido lastimero de metal protestando. Me deslizo al otro lado, hacia el Sector Residencial 8-Delta, y cierro la puerta tras de mí lo mejor que puedo, atrancándola con un trozo de barra metálica que encuentro tirado en el suelo del descansillo. Un obstáculo mínimo, pero quizás suficiente para ganar unos segundos si alguien me sigue.

He tomado mi decisión. Ahora tengo que enfrentarme a las consecuencias.

Transmisión recibida: 4/17/2025

ID: 112