Seguimos avanzando por el conducto helado, el silencio opresivo pesando sobre nosotros. Solo el crujido de nuestras botas sobre el hielo rompe la quietud.
"Este lugar me da escalofríos", murmura Scrappy de repente, su voz sonando extrañamente apagada en el aire gélido. "Y no solo por la temperatura. Es... demasiado silencioso. Antinatural."
"Gear dijo que el conducto estaba en desuso desde la Era del Fulgor", respondo, aunque comparto su inquietud. "¿Quizás simplemente está... muerto? Abandonado."
Scrappy suelta una risa corta y sin alegría. "Nada está realmente muerto en Oakhaven, Archivero. Solo duerme. O espera su oportunidad." Se detiene bruscamente, levantando la lámpara de aceite hacia una sección de la pared lateral. El haz infrarrojo de su ojo cibernético se enfoca en el mismo punto. "Hablando de esperar..."
Me acerco. Donde la luz de la lámpara derrite momentáneamente la escarcha más superficial, se revelan unas extrañas marcas grabadas profundamente en el metal de la pared. No son los patrones geométricos precisos de los Arquitectos, ni los grafitis caóticos de las bandas. Son símbolos o marcas curvas, fluidas, casi como una caligrafía desconocida, pero con un aspecto orgánico y claramente depredador. Parecen... marcas de garras. Enormes.
"Marcas de garras", confirma Scrappy mi pensamiento en voz baja. "Algo grande pasó por aquí. Y a juzgar por la escarcha que las cubre, no fue hace tanto tiempo."
Un escalofrío que no tiene nada que ver con el frío me recorre la espalda. Levanto el Sintonizador de Ecos, enfocando mi sensibilidad en las marcas, buscando cualquier resonancia residual.
La encuentro. Un Eco débil pero distintivo, diferente a cualquier otro que haya sentido. Es frío, calculador, con una textura que me recuerda a las escamas o a la quitina. Irradia una paciencia antinatural, un sigilo depredador y un hambre helada. Definitivamente no es el Cazador; su vacío es diferente. Esto es más... primitivo. Más animal.
"Algo vive aquí abajo", susurro, mi voz apenas audible. "O al menos, caza por aquí."
"Genial", masculla Scrappy con sarcasmo. "Exactamente lo que necesitábamos en nuestro tranquilo paseo subterráneo. Otro monstruo para añadir a la lista." Aumenta la intensidad del haz infrarrojo de su ojo, barriendo la oscuridad más adelante con nerviosismo. "Mantente alerta, Archivero. Y ten listo ese truco tuyo de agitar los Ecos, por si acaso necesitamos una distracción rápida."
Asiento en silencio, aunque la idea de usar mi resonancia de forma ofensiva de nuevo me llena de aprensión. La sobrecarga que causé en la compuerta fue incontrolada, casi suicida. Necesito aprender a enfocar mi poder, a usarlo con precisión, no solo como un martillo psíquico desesperado. Pero si esa cosa nos ataca... puede que no tenga otra opción.
Continuamos avanzando, la tensión ahora palpable entre nosotros. Cada sombra parece más profunda, cada crujido del hielo bajo nuestros pies suena como una advertencia. El silencio ya no es vacío, está preñado de una amenaza invisible y reptiliana.
Transmisión recibida: 4/17/2025
ID: 124