Con el plan acordado, nos acercamos de nuevo a la Tejedora de Datos, que nos observa con su calma insondable desde junto a la columna pulsante. Tomo la iniciativa, proyectando nuestros términos con la mayor claridad y firmeza que puedo reunir.
"Hemos tomado una decisión", comunico mentalmente. "Estamos dispuestos a un intercambio de información, Tejedora. Pero bajo ciertas condiciones."
Detallo nuestra contraoferta, siguiendo el plan de Scrappy. "Te contaremos sobre nuestros encuentros recientes con las facciones que mencionaste y los eventos que nos trajeron aquí. Y te permitiremos... escanear... la resonancia del libro de los Arquitectos, como pediste. Pero no habrá acceso directo a mis recuerdos. Responderé a preguntas específicas sobre nuestras experiencias, pero controlaremos qué información compartimos."
Luego, expongo nuestras demandas. "A cambio, queremos que cumplas tu parte. Queremos que analices nuestros artefactos –el libro, el mapa estelar y esta tablilla de datos– y nos expliques todo lo que puedas sobre su naturaleza y función, dentro de tu filosofía de armonía. Queremos toda la información que poseas sobre el Cazador de Ecos, los Cultores del Eco Roto y los Silenciadores, especialmente su actividad en este sector y cómo podríamos evitarlos o contrarrestarlos. Y, finalmente, necesitamos esa ruta segura que mencionaste. Una ruta que nos lleve a un lugar donde podamos estar a salvo por un tiempo considerable, quizás incluso fuera de Oakhaven si es posible, para que pueda estudiar y Scrappy pueda reparar su equipo."
La Tejedora de Datos permanece inmóvil por un largo momento después de que termino de exponer nuestras condiciones. Sus ojos plateados brillan suavemente mientras procesa la propuesta, la música matemática del Núcleo Armónico fluctuando sutilmente a su alrededor. ¿Aceptará nuestros términos? ¿O considerará nuestra cautela una ofensa o una limitación inaceptable?
Finalmente, su voz mental resuena de nuevo, tranquila y mesurada.
<< Un intercambio... aceptable. Aunque limitado. >> Hay una nota de... ¿resignación? ¿O simple reconocimiento de nuestras limitaciones? << La información completa y la verdadera armonización requerirían una resonancia más profunda, una conexión más directa. Pero comprendo vuestra cautela en este entorno de desconfianza. Trabajaré dentro de vuestros parámetros establecidos. >>
Un suspiro de alivio escapa de mis labios. Ha aceptado.
<< Comenzad, entonces >>, instruye la Tejedora. << Contadme vuestra historia. Iniciad desde el momento en que tú, Resonante, despertaste la baliza latente en el mapa estelar dentro de los Archivos Superiores. >>
Y así, en el corazón de un nodo tecnológico olvidado, un santuario de calma lógica en medio de la locura de Oakhaven, comienza el intercambio. Me siento en el suelo liso y frío, con Scrappy a mi lado, alerta y observadora. Frente a nosotros, la Tejedora de Datos escucha (o registra) con atención impasible.
Comienzo a relatar nuestra peligrosa odisea, desde el descubrimiento del mapa hasta nuestra llegada a este Núcleo Armónico. Scrappy interviene ocasionalmente para añadir detalles técnicos, corregir mi terminología de la Red de Sombra o aportar su perspectiva pragmática. Es una tregua frágil, una alianza improbable nacida de la necesidad mutua. Intercambiamos nuestras experiencias fragmentadas y peligrosas por el conocimiento antiguo y la perspectiva alienígena de la última Tejedora de Datos, esperando que esta extraña transacción nos proporcione las claves para sobrevivir a lo que está por venir. En la oscuridad de la Necrópolis de Neón, cualquier luz, por tenue o extraña que sea, es bienvenida.
Transmisión recibida: 4/17/2025
ID: 167