Transmisión 169

Fecha: 17.06.2189 (Estimado) Hora: Indeterminada

Cuando finalmente termino de relatar nuestra huida del Templo del Eco Interior, un silencio expectante cae sobre la cámara, roto únicamente por la constante música matemática del Núcleo Armónico. La Tejedora de Datos permanece inmóvil por un largo momento, los anillos de luz a su alrededor girando lentamente, sus ojos plateados fijos en algún punto intermedio, como si estuviera ejecutando simulaciones complejas o consultando archivos profundos. Scrappy y yo esperamos en tensión, preguntándonos cuál será su veredicto.

Finalmente, su voz mental resuena de nuevo, tranquila pero con un nuevo matiz de... ¿preocupación?

<< Los datos han sido... asimilados >>, comunica. << Vuestra narrativa confirma la creciente inestabilidad en la Señal y la peligrosa convergencia de múltiples actores –Custodios, Mecanistas, Silenciadores, Cultores, el Cazador– alrededor de los artefactos que portáis y de tu propia resonancia, Silas. La situación es significativamente más precaria y compleja de lo que mis registros locales aislados indicaban. >>

Su evaluación confirma mis peores temores. Somos el epicentro de una tormenta que no deja de crecer.

"¿Puedes ayudarnos?", pregunto mentalmente, mi voz cargada de urgencia. "Necesitamos entender estos artefactos. Y necesitamos saber más sobre nuestros perseguidores para tener alguna posibilidad."

<< Procederé con mi parte del intercambio acordado >>, responde la Tejedora, volviendo a su tono analítico. << Primero, el análisis de los artefactos que portáis. Su naturaleza y resonancia son clave para comprender vuestra situación actual y las motivaciones de quienes os persiguen. >>

Extiende una de sus manos delgadas y plateadas hacia mí, la palma abierta.

<< El libro de los Arquitectos, por favor. Solo necesito escanear su estructura de resonancia fundamental. No lo dañaré. >>

Miro el libro que llevo oculto, sintiendo su peso familiar y su extraña energía. Entregárselo, aunque sea temporalmente, a esta entidad alienígena se siente como un riesgo enorme. Pero es parte del trato. Y la promesa de entenderlo por fin... es demasiado fuerte para resistirse.