Transmisión 215

Fecha: 02.08.2189 (Estimado) Hora: Indeterminada

Mientras yo sigo contemplando con inquietud el panel silencioso, sintiendo ese vacío antinatural que emana de él, Scrappy suelta de repente una exclamación ahogada desde la consola.

"¡Lo encontré!", dice, su voz una mezcla de triunfo y tensión. "O creo que lo encontré." Señala una línea de código casi completamente corrupta en la pequeña pantalla verdosa, donde apenas se distinguen unas pocas palabras clave. "Hay una referencia fragmentada a algo llamado 'Protocolo Cero Absoluto'. Parece que fue activado manualmente justo antes de que se completara el sellado del nivel."

La miro, expectante. "¿Qué es? ¿Una purga final? ¿Un sistema de autodestrucción?"

"No lo sé con seguridad", admite Scrappy, sus dedos volando sobre el teclado virtual mientras intenta descifrar los parámetros asociados al protocolo. "Por el contexto, parece... una especie de salida de emergencia de último recurso. Una ruta de escape oculta vinculada a esa anomalía de resonancia que encontraste." Hace una pausa, su expresión sombría. "O podría ser una tumba. Un lugar para desaparecer sin dejar rastro si la contención fallaba por completo."

La ambigüedad es aterradora, pero no tenemos muchas opciones. "¿Puedes activarlo? ¿O desactivar el sello, si es una salida?", pregunto.

"Estoy intentando... reconstruir el comando de desactivación del sello", murmura Scrappy, completamente concentrada. "El código de activación está casi intacto, pero el de desactivación está hecho pedazos. Parece ser un código complejo, no una simple contraseña, sino algo basado en armónicos de datos... similar a cómo funcionan tus Ecos, pero a nivel digital."

Trabaja febrilmente, comparando fragmentos de código, probando secuencias, sus dedos moviéndose con una velocidad increíble sobre la pantalla táctil. El zumbido bajo de la consola parece intensificarse ligeramente con el esfuerzo.

"Creo que... sí... ¡Ahí está!", exclama finalmente, tecleando una secuencia final con un aire de certeza.

Presiona un último icono en la pantalla. Por un instante, no pasa nada. Luego, desde el otro lado de la sala, oímos un sonido muy suave, casi imperceptible. Un ligero clic, proveniente del panel metálico silencioso que yo había estado observando.

Nos miramos, conteniendo la respiración.

"¿Funcionó?", susurro, sin atreverme a moverme. El silencio vuelve a caer sobre el búnker, más pesado que antes.