Transmisión 367

Fecha: Indeterminada (Misión Culto - Rastreo) Hora: Indeterminada

Me concentro, filtrando el ruido de fondo de la Necrópolis, buscando las débiles pero distintivas firmas de energía disonante que dejó el Culto del Eco Roto. Mi resonancia dañada es como un instrumento desafinado, pero aún puede captar las notas discordantes si me esfuerzo lo suficiente. Es agotador, y cada intento me deja con un dolor de cabeza punzante, pero soy la única brújula que tenemos para seguir su rastro en este laberinto de ruinas y datos corruptos.

"Por aquí", indico, señalando hacia un complejo de edificios de servidores parcialmente derrumbado. "La actividad resonante... es más fuerte en esa dirección. Siento... Ecos retorcidos, amplificados artificialmente."

Guiados por mis débiles percepciones, avanzamos con cautela a través de las ruinas de los Antiguos Archivos. Pasamos por delante de bancos de datos destrozados, cables de fibra óptica rotos que cuelgan como enredaderas muertas y terminales destrozadas que aún parpadean débilmente con información corrupta. El aire está cargado con el olor a metal oxidado, plástico quemado y el inconfundible hedor a descomposición de datos.

Finalmente, llegamos a una gran sala de servidores subterránea, relativamente intacta pero claramente profanada. Las paredes están cubiertas con los mismos grafitis espeluznantes que vimos en la superficie, brillando con una luz enfermiza. En el centro de la sala, el Culto ha creado una especie de... altar.

Es una construcción caótica hecha de tecnología recuperada: trozos de servidores, condensadores de flujo rescatados, cables de energía conectados a fuentes de alimentación inestables, todo dispuesto alrededor de un círculo de extraños cristales resonantes rotos que parecen haber sido arrancados de algún equipo antiguo. Varios dispositivos improvisados zumban y chisporrotean, proyectando un campo de energía visiblemente inestable y disonante sobre el círculo. Puedo sentirlo claramente ahora: están intentando realizar algún tipo de ritual, utilizando la tecnología recuperada para capturar, amplificar y corromper los Ecos residuales atrapados en esta sala.

"Qué desastre", murmura Scrappy, acercándose al altar improvisado mientras Unit 7 y Unit 12 aseguran las entradas de la sala. Saca su multi-tool y comienza a escanear la tecnología. "Están jugando con fuego. Usando condensadores de flujo inestables para amplificar Ecos... esto podría explotar en cualquier momento. O peor, crear una brecha resonante."

Mientras Scrappy analiza la peligrosa mezcla de tecnología, yo me concentro en la energía del ritual mismo. Cierro los ojos, extendiendo mi resonancia dañada hacia el campo disonante. Intento comprender su propósito. No es como el silencio de los Silenciadores, que buscaba borrar la Señal. Esto es diferente. Es caótico, ruidoso, una cacofonía deliberada. Siento que intentan... forzar algo. ¿Atraer algo? ¿O quizás comunicarse con algo que reside en la propia disonancia?

La energía es nauseabunda, y siento cómo la estática en mi cabeza aumenta de nuevo. Pero a través del caos, percibo un patrón débil, una intención subyacente. Están tratando de sintonizar la disonancia, de usar los Ecos rotos como una especie de... llave.

"No solo están amplificando Ecos", digo, abriendo los ojos con esfuerzo. "Están intentando... abrir algo."